Los Agentes Medioambientales sobrepasarán los 25000 controles de pesca en la Comunidad de Castilla y León.
Los Agentes Medioambientales han iniciado un operativo especial para el control de la actividad piscícola en todas las provincias de la comunidad autónoma. Solo en la provincia de León se alcanzará la cifra de 7000 controles de pescadores.
En todas las comarcas de León se realizarán servicios de inspección, no solo en las zonas pescables, sino en todas las masas de agua, independientemente de su clasificación y régimen de protección. Asimismo, se llevarán a cabo servicios especiales fuera del horario de pesca establecido por la normativa.
Para la nueva temporada de pesca, se han introducido modificaciones legislativas. Estas modificaciones en León afectan en gran medida al acceso al ejercicio de la pesca de salmónidos y sus condiciones, e inciden sobre todo en la pesca sin muerte. Las aguas en las que se puede pescar son:
- Aguas de acceso libre, donde el ejercicio de la pesca es libre, y en la modalidad sin muerte;
- Cotos de pesca, sujetos a un permiso expedido por la Consejería;
- Cotos intensivos, sujetos a un permiso expedido, donde solo se puede extraer trucha arcoíris (Oncorhynchus mykiss), pero tienen que devolverse a las aguas las truchas autóctonas (Salmo trutta fario);
- Aguas en régimen especial controlado (AREC), sujetas a un código de control expedido, de carácter gratuito;
- Escenarios deportivo-sociales, sujetos a un pase de control expedido, de carácter gratuito.
Además, están los vedados y refugios de pesca, donde no está permitido pescar.
León cuenta con una riqueza enorme de ríos trucheros, con muchos kilómetros pescables y con tramos de gran calidad y prestigio entre los pescadores. La pesca en León, especialmente de trucha autóctona, es una actividad tradicional con gran arraigo social que cuenta con gran aceptación en la provincia y entre los pescadores de otras procedencias, y que ha adquirido en los últimos años una orientación deportiva. Además, la pesca de cangrejo señal (Pacifastacus leniusculus) se ha aumentado en los últimos años con varios tramos donde se pueden pescar estos crustáceos.
Los controles realizados por los Agentes Medioambientales consisten en la vigilancia de los tramos y de los pescadores que se encuentran en ellos. La dirigida a los pescadores puede ser indirecta, en la que no se llega a interactuar con el pescador, o directa, en la que se requiere la documentación necesaria para pescar, se recogen los datos, se comprueban los aparejos utilizados y las piezas de pesca capturadas. En ocasiones estos controles de la actividad piscícola terminan en denuncias por infracciones, como pueden ser la utilización de aparejos o medios de pesca no permitidos, la falta de documentación requerida, superar el cupo de capturas del tramo en el que se encuentra o haber capturado piezas de medida inferior a la permitida.
El esfuerzo de control realizado por los Agentes Medioambientales queda reflejado en los documentos de control que se rellenan para cada tramo; precisamente, en esta campaña, la Dirección General del Medio Natural de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente tiene previsto realizar una recopilación de datos para su tratamiento estadístico. Se ha establecido como objetivo mínimo la realización de 25000 controles en el conjunto de la Comunidad Autónoma, de los que en la provincia de León se superarán los 7000 controles efectuados por los Agentes Medioambientales.
El esfuerzo dedicado por los Agentes Medioambientales a esta materia se incrementa en la época de freza de la trucha y en la temporada en que está permitida la pesca, si bien la vigilancia y supervisión de los ríos es continua, también en lo relacionado con obras y trabajos que puedan afectar a la calidad de los cursos de agua, como vertidos, modificación de cauces, extracción de áridos, restauración de riberas… con el objetivo final de conservar la buena calidad del ecosistema acuático.